El vino blanco afrutado, un tesoro
Como su nombre indica el “ vino blanco afrutado ” es aquel que evoca recuerdos a frutas, especialmente, maduras y no necesariamente a uva. Los hay, por ejemplo, que recuerdan a melocotón. Por eso, hay muchos expertos que, dado el carácter frutal de estos vinos, dicen que su terminología correcta sería “vinos frutales”. Hoy, y como no podía de ser otra forma, te hablamos sobre ellos en Circulo de Bodegas, tu tienda de vinos online en España.
El vino blanco afrutado
Un buen vino blanco afrutado gusta a todo el mundo, incluso los menos aficionados al vino encuentran un blanco afrutado que les va bien. Son versátiles y eso los hace imprescindibles: para un aperitivo, mariscos, pescados, pasta, comida especiada y por supuesto verduras, ensaladas y… la sorpresa: muchos quesos, sobre todo de cabra y de pasta blanda. Pruébalos también con sabores exóticos: comida china, thai o sushi.
La antigüedad no cuenta..
La mayoría no son para guardar. No creas que años de bodega van a mejorarlos. Al contrario, a muchos los arruinan porque pierden esa frescura y esa impresión de juventud. No lo veas como algo negativo, son vinos para abrir y cambiar continuamente, para ni dudarlo cuando estés con el sacacorchos en la mano pensando ¿que abro?. Recuerda: van con muchas cosas y siempre aportan alegría a la reunión. Dales movimiento y no te arrepentirás.
Como elaborarlos
Para elaborar vinos afrutados hay que tener una variedad de uva apropiada y en su punto de madurez preciso, con mucho potencial aromático, que proceda de cepas de buena calidad y por supuesto hacer un proceso de vinificación adecuado: maceración pre-fermentativa a bajo grado y fermentación a baja temperatura, entre otras.
Si buscáis una explosión de sabor, aromas profundos y elegantes, y unos vinos que se conviertan en especiales para cualquier momento del día, sin duda, vuestra elección deberá ser los “vinos blancos afrutados” y la encontraréis en la tienda de vinos online de Círculo de Bodegas. Hasta el próximo post.