¿Sabes realmente hasta dónde se debe llenar una copa de vino?
Típica situación: se descorcha una botella de vino y empiezan los dilemas. Que si qué copa elegir, que si cómo conservar el vino… Cuando nos disponemos a llenar una copa de vino, siempre nos encontramos con la eterna pregunta. Pero realmente, ¿hasta dónde tenemos que llenar una copa de vino?
Bien, la respuesta a esta pregunta depende del tipo de vino en cuestión.
Hasta dónde llenar la copa de vino según su tipo
Vino blanco
En este caso, llenaremos la copa hasta la mitad, aunque podríamos llegar a los tres cuartos de la copa.
Vino rosado
Estos vinos se caracterizan por su ligereza, con lo que llenarlos hasta la mitad de la copa es la opción ideal.
Vino espumoso
Lo mejor es llenar la copa hasta arriba, dejando un margen para la espuma. Una vez esta desaparezca, se podrá llenar de nuevo hasta el tope.
Vino tinto
Vino tinto joven
Como ocurre con el vino rosado, llenaremos la copa hasta la mitad.
Vino crianza o reserva
Debido a la gran cantidad de aromas diferentes y matices que posee este tipo de vino, es necesario mover la copa para poder captar todo lo que nos ofrece. Así pues, este tipo de vino se servirá hasta un tercio de la copa.
Normalmente, en las bodegas cuando vas a comprar tu botella de vino te pueden facilitar este tipo de información. Así como otra de interés, como puede ser la temperatura perfecta para la conservación de este, con qué marida el vino, en definitiva, errores y aciertos respecto a esta sofisticada bebida. Desde luego, si la bodega a la que le encargas el vino, es incapaz de ofrecerte dicha información o no tienen personal cualificado para esto, no es una bodega de confianza. En estas situaciones, es imprescindible ponerse en manos de profesionales, por eso te ofrecemos los mejores vinos a precios estupendos y te los llevamos a casa.
Al fin y al cabo, llenar una copa de vino es todo un arte que supone mucha práctica y dedicación.